DESPUÉS DEL SOL…

Durante estos días te hemos dado una serie de recomendaciones para que disfrutes del sol de una manera saludable y puedas conseguir un maravilloso bronceado sin poner en riesgo tu piel. Hoy cerramos este capítulo de sol dándote unas recomendaciones sobre cuidados post solares.

Al exponernos al sol nuestra piel se deshidrata y pierde nutrientes, lo que provoca que se reseque y pierda tersura. El calor del sol provoca evaporación de agua de nuestro cuerpo con lo que es imprescindible reponerla.

Los cuidados post solares le dan a la piel la oportunidad de restablecerse y evitar el envejecimiento prematuro. El uso de after sun permite recuperar el equilibrio hídrico adecuado que evitará la descamación excesiva de la piel.

¿Qué hacer al llegar a casa después de tomar el sol?

playa2

Lo primero que debes hacer es darte una ducha para retirar los restos de protector solar, salitre o cloro. Intenta que el agua de la ducha esté más bien fría para aliviar la temperatura de tu piel. No utilices un jabón abrasivo o un gel que desengrase demasiado. Opta por fórmulas suaves y respetuosas con la piel.

playa3

Tras la ducha es imprescindible que apliques un after sun. Este tipo de productos, sobre todo los que tienen textura gel, alivian la quemazón de forma inmediata. Aplícalo aunque no tengas la sensación de que te has quemado. Si existe bronceado significa que se ha producido un daño sobre la piel, de manera que hay que recuperarla. Los productos post solares tienen un efecto anti inflamatorio que descongestiona la piel enrojecida por el sol. Busca productos que contengan Aloe Vera, Caléndula, Bisabolol, Mentol, Alantoína, Vitaminas… ya que todos ellos ayudarán a paliar el daño producido por el sol.

Truco: antes de salir de casa, pon tu after sun en la nevera. El frío ayudará a aliviar la sensación de quemazón que se produce al excedernos con el sol e incrementará su poder antiinflamatorio.

¡Socorro! ¡Me he quemado!

playa1

El mejor remedio siempre es la prevención. Pero en cualquier caso, si ya tienes una quemadura solar lo que nunca debes hacer es aplicar hielo. Piensa que una piel quemada es una piel hipersensible en la que el hielo podría provocar lesiones aún mayores. Si sientes la necesidad de aplicarte frío sobre la zona afectada, hazlo con toallas o compresas mojadas en agua fría.

Si te has quemado al sol cuando te duches evita hacerlo con agua caliente ya que incrementarías la inflamación de la zona afectada, y al secarte la piel, hazlo con suaves presiones y sin frotar.

Si a tu piel le han salido ampollas significa que la quemadura reviste una cierta gravedad y lo mejor es que consultes con un especialista. En cualquier caso, lo que nunca debes hacer es pincharlas o reventarlas para evitar infecciones y lesiones mayores.

Después de la quemadura…

Tras la quemadura solar lo más probable es que tu piel se pele como consecuencia de la sobreexposición al sol. Si durante los días posteriores extremas los cuidados de la zona dañada disminuirás la posterior pérdida de piel. Sigue aplicando tu after sun varias veces al día y combínalo con alguna crema más emoliente.

playa4

Si ya te estás pelando, resiste la tentación de arrancarte las pielecitas ya que dejarás al descubierto piel que aún no está preparada para exponerse al sol. Es mejor que aportes un extra de hidratación y dejes que la naturaleza siga su curso. Al tratarse de piel nueva, extrema las precauciones en esa zona cuando la expongas a la radiación solar.

Ahora ya sabes cómo cuidarte antes, durante y después del sol. Y ahora, ¡a disfrutar el verano al máximo!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *