Un factor muy común que puede poner en riesgo nuestra salud desatando enfermedades tipo gastritis, insomnio, migraña, depresión, diferentes trastornos negativos para nuestro cuerpo… es la ANSIEDAD.
La ansiedad no es otra cosa que la respuesta de nuestra mente y cuerpo hacia una amenaza externa, un peligro que nos rodea y nos crea ciertas sensaciones de temor e incomodidad. Nuestro sistema fisiológico, afectivo, cognitivo y conductual se activan en diferentes direcciones funcionando de manera desordenada e incorrecta. Esto hace que aumente nuestro miedo y nuestra incertidumbre por ser una situación desconocida. Nos mostramos mucho más vulnerables hacia ese temor y la ansiedad crece.

Por ejemplo:
El pescado es rico en ácidos grasos Omega 3.
Los melocotones contienen mucha vitamina B.
La Patata aporta vitamina B6 además de incrementar los niveles de serotonina encargada de controlar los niveles de ansiedad.
Almendras con alto contenido en hierro y vitamina B12, además que son una fuente de energía inmejorable para soportar todo el gasto diario.
Raíz de Maca, excelente para tomarla en infusión. Una sola taza aporta un mayor número de nutrientes que la mayoría de la fruta.
La ansiedad puede llevarnos a comer más de la cuenta entre otras muchas cosas, por eso lo mejor que podemos hacer además de ponernos en manos de un experto, es tener siempre a mano alimentos saludables al 100% que al mismo tiempo nos ayuden a combatirla y ganar la batalla.